Hace una semana volvió la NBA con victorias pero sorpresivamente de los equipos menos esperados, principalmente de la conferencia este.

Increíblemente los equipos como Milwaukee Bucks o Toronto Raptors han empezado acumulando más derrotas que victorias. El equipo de Giannis pudo derrotar a los Warriors de Curry pero cayeron frente a los Celtics y lo más sorpresivo, frente a los Knicks por una diferencia de 20 puntos. Por otro lado el equipo canadiense no pudo contra 2 equipos del oeste acumulando solo derrotas y preparándose para enfrentar a los 76ers.

Pero lo más sorprendente de este comienzo son los 4 líderes.  Primero Orlando Magic derrotando a los Wizards de Westbrook dos veces seguidas y al último finalista de la NBA, Miami Heat. Luego resaltan los CAVS con un grupo de Rookies acompañados de la experiencia de Kevin Love, algo diferente en perspectiva al equipo de Trae Young quien lidera Atlanta cómodamente. Y por último los Pacers quienes recuperaron a Oladipo pero liderados por el lituano Domantas Sabonis.

En el salvaje oeste la sorpresa está en que el proyecto de New Orleans emerge poco a poco con Zion e Ingram encabezando la franquicia al igual que Minnesota con Towns en su posible último año en la franquicia y el novato Anthony Edwards destacando poco a poco. Lo llamativo también es la mejora significante que han tenido los Suns desde la llegada de  Chris Paul y principalmente la de los Kings quienes se quedaron muy cerca de los play-off la temporada pasada.

Por otro lado sorprende que los Mavericks, Nuggets y Grizzlies estén por debajo de la clasificación pero más que Houston Rockets este último y con Harden pidiendo a gritos un traspaso a cualquier equipo llamando la atención anotando 78 puntos en 2 partidos. Esto sin la presencia de sus otras dos estrellas como DeMarcus Cousins y John Wall quienes esperan estar bien físicamente en breve.